}
Los super poderes del Autogas
¿Te imaginas conducir un coche que no solo cuida tu bolsillo, sino también el medio ambiente? Si aún no has oído hablar del Autogas, prepárate para sorprenderte. Este combustible alternativo está revolucionando…
Trabajar para reducir las emisiones de CO2 y la huella de carbono de la actividad humana es imprescindible y urgente, si queremos conservar la vida en el planeta tal y cómo la conocemos. Debido a ello, surge el concepto de compensar la huella de carbono.
La emisión de gases contaminantes a la atmósfera es una de las principales causas del calentamiento global y del cambio climático. Por ello, en este post vamos a explicarte cómo poder compensar la huella de carbono. ¡Sigue leyendo!
Antes de centrarnos en cómo compensar tu huella de carbono, empecemos definiendo algunos conceptos.
Por un lado, la huella de carbono es un indicador que nos ayuda a evaluar el impacto medioambiental de una determinada actividad humana. Este indicador representa el volumen de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que genera, de manera directa o indirecta, esa actividad. Podemos hablar de la huella de carbono individual, de la huella de carbono de un producto o de la huella de carbono de una organización.
Por otro lado, cuando hablamos de neutralidad climática, también conocida como neutralidad de carbono, podemos decir que esta se alcanza cuando los niveles de dióxido de carbono (CO2) emitidos a la atmósfera son iguales a los niveles de CO2 que se retiran por diversas vías, dejando el balance a cero.
En este sentido, tanto las personas como las organizaciones pueden llevar a cabo ciertas acciones de cara a compensar su huella de carbono, absorbiendo niveles del CO2 presente en la atmósfera. De esta manera, se obtendría un balance cero de emisiones, puesto que se retirarían de la atmósfera los mismos niveles de CO2 que se habían expulsado previamente.
Desde hace tiempo las instituciones internacionales trabajan para impulsar la neutralidad climática en todos los sectores. Así, las nuevas legislaciones no solo exigen una reducción de las emisiones contaminantes expulsadas a la atmósfera, sino que encaminan a la sociedad a compensar su huella de carbono a través de diferentes acciones.
Lo cierto es que la situación es alarmante. En los últimos años las emisiones contaminantes se han intensificado. Cada vez somos más dependientes de los recursos energéticos, del transporte o de los procesos industriales y, en muchas ocasiones, estas actividades emiten gran cantidad de emisiones a la atmósfera.
En la actualidad, China, Estados Unidos y la India son los países que más emisiones de CO2 emiten a la atmósfera. China acumula 11.680,417 millones de toneladas CO2 procedentes del uso de combustibles fósiles y procesos industriales. Estados Unidos acumula 4.535,301 millones de toneladas e India, 2.411,733.
España por su parte, está generando 214,847 millones de toneladas de CO2. Si profundizamos en ello, podemos decir que, de media, un español emite, aproximadamente, un volumen de 7,15 toneladas de CO2 a la atmósfera al año.
Estas cifras son elevadísimas y ponen en riesgo la salud del planeta. Por ello, es necesario actuar y adoptar medidas que consigan minimizar el impacto medioambiental de la actividad humana.
Hablamos de compensación de emisiones de carbono cuando nos referimos a las acciones que persiguen neutralizar las emisiones contaminantes que derivan de la vida humana y de la actividad industrial. Así, nos referimos a una serie de medidas que buscan retirar de la atmósfera el mismo nivel de emisiones de CO2 que previamente se ha expulsado. El objetivo es lograr el balance cero de emisiones.
Para defender la transparencia y certificar la credibilidad de un proyecto de compensación, existen una serie de certificaciones de compensación de carbono. Algunas de estas certificaciones son las siguientes:
Además de las certificaciones, son varias las alternativas que, individuos y organizaciones, tienen a su disposición para compensar su huella de carbono. A continuación, te mencionamos algunas de ellas:
Como hemos visto, en la actualidad las emisiones que se expulsan a la atmósfera son muy elevadas y es necesario tomar acciones para reducirlas, tanto a nivel personal, como empresarial o institucional.
De hecho, cada vez son más las empresas que trabajan para compensar su huella de carbono. Esto, no solo se ha convertido en una imposición institucional, sino que además presenta una serie de ventajas corporativas.
Además de ayudar a mitigar el cambio climático, a través de la compensación de tu huella de carbono reforzarás tu imagen de marca. Las empresas ecoeficientes son cada vez más valoradas por un consumidor y un trabajador cada vez más comprometido.
Y tú, ¿ya trabajas para compensar tu huella de carbono?
}
}
}