Los super poderes del Autogas
¿Te imaginas conducir un coche que no solo cuida tu bolsillo, sino también el medio ambiente? Si aún no has oído hablar del Autogas, prepárate para sorprenderte. Este combustible alternativo está revolucionando…
Lo cierto es que el mundo se enfrenta a una emergencia climática nunca antes experimentada. En paralelo, los consumos energéticos (y sus emisiones a la atmósfera) se disparan. En este contexto, transformar nuestros hábitos de consumo y adoptar medidas orientadas a la sostenibilidad energética se ha vuelto un asunto urgente.
Por ello, y en motivo del Día Mundial del Ahorro Energético, en este post queremos adentrarnos en el concepto de sostenibilidad energética para conocer sus implicaciones y su incidencia en el futuro del planeta.
El concepto de “sostenibilidad”, tal y como lo conocemos en la actualidad, aparece por primera vez en el Informe Brundtland, publicado en 1987. Este documento, también llamado “Nuestro futuro común” fue elaborado por las Naciones Unidas para alertar a la sociedad sobre las consecuencias medioambientales negativas del desarrollo económico, la globalización y el crecimiento poblacional.
Por su parte, la RAE (Real Academia Española) define el término de sostenible como “aquello que se puede mantener durante largo tiempo sin agotar los recursos o causar grave daño al medio ambiente”.
Así, al hablar de sostenibilidad asumimos que, parte de los recursos de la naturaleza y el medio ambiente no son agentes infinitos o inagotables. Impulsar la sostenibilidad significa trabajar para promover un desarrollo social y económico equitativo, que garantice la durabilidad de los recursos, la salud del planeta y la protección medioambiental.
El modelo energético actual, implantado desde hace aproximadamente 150 años, resulta insostenible por razones ambientales, económicas y sociales. Este modelo destaca por un crecimiento imparable de los consumos energéticos basados en recursos finitos y contaminantes, principalmente combustibles fósiles.
Según las previsiones de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la demanda de energía se incrementará hasta un 30% el año 2040. En este marco, el cambio de modelo energético hacia un sistema sostenible, basado en energías limpias y renovables, será indispensable para garantizar el suministro energético global y para hacer frente a la crisis climática.
La llamada sostenibilidad energética exige el equilibrio de las siguientes tres dimensiones:
Como mencionábamos, el planeta se enfrenta, en el momento actual, a la que probablemente se podría definir como la mayor crisis climática de todos los tiempos.
La degradación socioambiental, unida al progresivo agotamiento de los recursos naturales, ha procurado la necesidad de iniciar una profunda revolución energética. El cambio, eso sí, debe ser progresivo para no poner en riesgo el abastecimiento energético mundial o el desarrollo económico-social de los diferentes países.
La transición energética se consolida así como el camino hacia un nuevo modelo energético, más limpio y sostenible, en el que las energías renovables, por ser inagotables y no contaminantes, jugarán un papel protagonista.
Son varias las medidas que podemos adoptar para favorecer la sostenibilidad energética:
El tiempo se agota para frenar el calentamiento global y para poner fin al agotamiento de recursos. En este sentido, debemos tener en cuenta que nuestras acciones individuales pueden ser determinantes para lograr cambios globales. Ya lo decía Eduardo Galeano: “Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo”.
Reducir nuestros consumos energéticos o elegir un suministro basado en energías limpias, como las renovables, el propano o el biopropano, serán actitudes clave para lograr la sostenibilidad energética.
Y tú, ¿te animas a poner tu granito de arena? ¡Ponte en contacto con nuestro equipo y empieza a reducir tu huella de carbono!