¿Qué es un CAE?
Imagínate que mejoras el aislamiento de las ventanas o instalas un nuevo equipo
más eficiente para calentar el agua. Con estas acciones no solo estarías
ahorrando energía y dinero, sino que también estarías ayudando al planeta.
Ahora piensa que, alguien te pagara por esos ahorros. ¡Eso, es un CAE!
Un CAE es un “comprobante” que certifica que has ahorrado
1kWh (un kilovatio-hora) de energía al año gracias a las mejoras que has hecho
en tu casa. Es como si el esfuerzo que haces por ser más eficiente ¡tuviera un
premio!
¿Por qué existen los CAE?
En Europa, todos los países tienen que esforzarse para consumir
menos energía. Para ello, España decidió crear este sistema para fomentar que
las personas, empresas y comunidades ahorren más energía. La idea es que, en lugar
de que solo se quede en buenos propósitos de algunos, haya un incentivo real
que atraiga a la gente: el dinero.
Con este sistema, no solo se premia a quienes ahorran
energía, sino que también se abre un nuevo mercado donde las empresas
energéticas (de luz, gas o combustible) tienen la obligación de ahorrar una
cierta cantidad de energía cada año.
Pero ¿Qué pasa si no pueden cumplir y no
ahorran la suficiente energía?
Las empresas de energía (sujetos
obligados) tienen la obligación de ahorrar.
Tienen dos opciones: la primera es
realizar proyectos propios de ahorro energético, y la segunda es pagar al Fondo
Nacional de Eficiencia Energética. Este pago lo pueden realizar con dinero o
con Certificados de Ahorro Energético (CAEs).
¿Cómo funcionan los CAE?
Para conseguir un Certificado de Ahorro Energético deberás
seguir tres pasos:
1.Ahorra energía: cambia bombillas, mejora el aislamiento de tus ventanas, instala paneles solares… lo que sea que haga que consumas más energía.
2.Verifica tus ahorros: Un especialista comprobará que los cambios que hiciste realmente ahorran energía.
3.Obtención del CAE: Se emite un certificado por cada kWh ahorrado que vas a poder vender a empresas o usar para cumplir obligaciones.
Así de simple, tu ahorras energía, alguien te lo reconoce
oficialmente y puedes convertir ese ahorro en dinero.