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¿Qué es la neutralidad climática y cómo podemos alcanzarla?

¿Qué Es La Neutralidad Climática Y Cómo Podemos Alcanzarla
En un contexto de cambio climático, resulta imprescindible adoptar medidas urgentes para frenar las emisiones de gases contaminantes que están provocando esta situación y alcanzar la denominada neutralidad climática.

El cambio climático que deriva del aumento global de las temperaturas está teniendo efectos devastadores sobre la Tierra.

El deshielo de los polos, la subida del nivel del mar, la erosión costera, las inundaciones, las sequías, los incendios, la destrucción de la fauna, de la flora o de las cosechas son solo algunas de las consecuencias tangibles de la actual crisis medioambiental. Todo ello podría acabar pronto con la vida en el planeta tal y como la conocemos. 

Desde hace tiempo, las instituciones trabajan para hacer frente a esta situación y, en este sentido, la Unión Europea acaba de aprobar recientemente la Ley del Clima.

¿Qué es la neutralidad climática?

La neutralidad climática, también llamada neutralidad de carbono, se alcanza cuando los niveles de dióxido de carbono (CO2) emitidos a la atmósfera son iguales a los niveles de CO2 que se retiran por diversas vías, dejando el balance a cero. Este balance a cero (neutralidad de carbono) representa la comúnmente conocida como huella cero de carbono.

La mejor alternativa para conseguir este equilibrio es reducir lo máximo posible las cantidades de gases que se emiten a la atmósfera. Lo ideal sería no emitir más CO2 del que pueden absorber los sumideros naturales.

Sumideros naturales son, por ejemplo, los bosques y las plantas. A través de la fotosíntesis, estos seres vivos consiguen absorber el CO2 de la atmósfera y transformarlo en oxígeno. También el suelo y los océanos funcionan como sumideros naturales.

Sin embargo, en la actualidad los sumideros naturales consiguen eliminar entre 9,5 y 11 gigatones (Gt) de CO2 al año, mientras que las emisiones globales anuales de CO2 alcanzan los 38 Gt. Este exceso de emisiones de CO2 emitidas a la atmósfera deriva, fundamentalmente, de la actividad humana.

Objetivos de la Unión Europa para la neutralidad de carbono en 2050

Esta alarmante situación, que podría poner fin a la vida en el Planeta, ha movilizado a las instituciones internacionales. La mayor parte de los países del mundo ya trabajan para concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de adoptar comportamientos más respetuosos con el medio ambiente.

En concreto, la Comisión Europea presentó en 2019 el Pacto Verde Europeo, un proyecto para conseguir la neutralidad climática en 2050. El objetivo de este proyecto no era otro que resistir al cambio climático y poner freno a sus dramáticas consecuencias.

Este proyecto ha trazado un plan que impulsa la inversión en tecnología y la capacitación de la ciudadanía para reducir la huella de carbono. De la misma manera, el plan ha sido diseñado para lograr el equilibrio de la acción en terrenos clave como la política industrial, la economía o la investigación, garantizando la justicia social para una transición justa.

El Pacto Verde Europeo establece que las emisiones del conjunto de la Unión Europea deben reducirse en un 20% en 2020 respecto a los niveles del año 1990. En 2030 las emisiones deberán haberse reducido un 60% respecto a los niveles del año 1990. El plan aspira a conseguir la neutralidad total en 2050.

La puesta en marcha de este proyecto se ha confirmado con la aprobación de la Ley del Clima por parte del Parlamento Europeo en octubre de 2020.

Objetivos de España para la neutralidad climática

España también ha manifestado ya su compromiso para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. Así, el país se ha adherido a la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, al Protocolo de Kioto, el Acuerdo de París y al Pacto Verde de la Unión Europea.

En esta misión, el Gobierno de España aprobaba en 2020 la Estrategia de Descarbonización a largo Plazo (ELP 2050), que define el camino a seguir para lograr la neutralidad climática en 2050.

Este plan de trabajo permitirá reducir hasta un 90% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) a 2050 con respecto a 1990. El 10% de las emisiones restantes serán absorbidas por los sumideros naturales de carbono. Esto supone reducir las emisiones de CO2 desde los 334 millones de toneladas equivalentes (MtCO2eq) registradas en 2018 a unos niveles máximos de 29 MtCO2eq en 2050.

Se prevé que el conjunto de medidas que se integran en la Estrategia repercutirá positivamente en el desarrollo económico y en la generación de empleo.

Medidas para alcanzar la neutralidad climática

Son varias las medidas sociales que se han de adoptar de cara a alcanzar la neutralidad climática:

  • Movilidad limpia y sostenible: Minimizar los desplazamientos innecesarios, reducir el uso del coche, apostar por el transporte público y fomentar una movilidad sostenible mediante desplazamientos a pie, en bicicleta, en vehículos eléctricos o de autogas, serán acciones imprescindibles para reducir la emisión de gases contaminantes.


  • Energías renovables: En un contexto de transición energética, sustituir las energías contaminantes por las energías renovables nos permitirá reducir drásticamente los niveles de CO2 que se emiten a la atmósfera.
  • Industria y economía circular: Transformar la economía hacia modelos circulados, basados en el reciclaje, el reaprovechamiento y la reutilización conseguirá también reducir el impacto de las actividades empresariales y productivas sobre el medio ambiente.

Neutralidad climática: Más allá de 2050

Adoptar medidas para frenar el aumento de las emisiones de CO2 se ha convertido en una cuestión urgente que no podemos retrasar. Si bien el esfuerzo para reducir las emisiones puede parecernos ahora complejo, lo cierto es que la neutralidad climática no es una utopía. Simplemente se trata de un camino que exige cambios y adaptación.

Este proceso de descarbonización debe ejecutarse de manera progresiva, a través de políticas que garanticen un desarrollo económico sostenible y resiliente. Sin perder de vista la economía, debemos trazar una mirada a largo plazo y dejar atrás el modelo actual de nuestra sociedad, altamente contaminante.

La realidad es que esta es la única alternativa que tenemos si queremos garantizar la vida de los 9 mil millones que vivirían en la Tierra en 2050 y si queremos preservar un planeta próspero y habitable también para las generaciones futuras.

Y tú, ¿qué medidas adoptas para disminuir tu huella de carbono? ¿Crees que Europa conseguirá alcanzar su objetivo de lograr la neutralidad climática en 2050?